Lo llamaremos el “Día de la Deshonra Nacional”
Lo ocuparemos para fundar el “Día de la Familia Normal y Tradicional”
El fallo de la Corte Interamericana de Derechos Humanos sostiene que el Juzgado de Menores de Villarrica y la Corte Suprema chilena deberían haberle concedido la tuición a la madre de las niñas López, sin importarles que ella fuera homosexual y que conviviera con otra mujer. ¿Por qué los jueces de esta Corte Interamericana actúan tan contrariamente a como lo aconsejarían la inmensa mayoría de los ciudadanos de todos los países del continente americano? Lo hacen por razones ideológicas y políticas. El Mercurio da cuenta que esta Corte ha sido duramente criticada por el fuerte sesgo ideológico de sus componentes y Wikipedia informa que: “el actuar de la Corte no ha estado exento de críticas. Entre otras cosas, se ha criticado la politización de la Corte. Fuertes críticas han venido de Perú y Venezuela. Las críticas más recientes fueron motivadas por la sentencia del caso de la masacre de Mapiripán, en contra de Colombia, donde la Corte afirmó la muerte de 49 personas, muchas de las cuales fueron halladas vivas con posterioridad”.
Esta ideologización y politización de la Corte determinan inexorablemente sus fallos. ¿Alguien pensó alguna vez que la Corte fallaría en contra de la jueza Atala? ¿Hay alguien en el país que piense que la profesora de religión católica perderá el juicio? Para producir el evidente veredicto, la Corte fue capaz de cualquier cosa, don Jaime, el padre de las niñas López, que es abogado, se pregunta: ¿cómo es posible que en un juicio internacional se considere "víctimas" a tres de mis hijas, e incluso en su nombre se pidan indemnizaciones por los supuestos "daños" que se les provocaron? Por años no se les preguntó a mis hijas, ahora adolescentes, si querían ser parte de ese juicio, y si realmente se consideraban a sí mismas como "víctimas". Para quienes tramitaron este juicio, nunca importó su realidad. Ahora, ya terminados los alegatos, se descubre que faltó lo más importante, y a última hora se busca solucionar el problema, con una "apariencia" de que han sido escuchadas. Se designa una delegación de la Corte Interamericana, que llega a un hotel de Santiago, y dos de ellas son llevadas a una entrevista sin padres, sin representantes, y peor aún, se designa para "asesorar" a esta delegación a una psiquiatra, que no es su médico tratante, sino que la misma profesional que ya había declarado en favor de una de las partes en el juicio. Mis hijas no solamente fueron ignoradas por años, ahora que las necesitan, se les niega mínimas garantías.
El fallo del Juzgado de Menores de Villarrica y de la Corte Suprema de Justicia chilena fue salomónico, porque se dictó pensando en el superior bienestar de las niñas, situación que consiguieron claramente, ya que al respecto don Jaime López dice: “En mayo se cumplen ocho años desde que la Corte Suprema me dio la responsabilidad del cuidado y crianza de mis hijas, de entonces 9, 7 y 5 años de edad. Estos 8 años han sido la mayor bendición que un hombre puede esperar, que no se cuantifica en dinero ni en honores. Como si ello fuera poco, Dios puso en mi camino una mujer maravillosa, y aumenta la alegría de mi casa con dos hijas más. Ahora son cinco hermanas que se quieren, que comparten; las más pequeñas, con admiración hacia las mayores, y estas últimas, con paciencia y cariño.” A nosotros como evangélicos, nos agrada mucho el fallo de la Corte Suprema de Justicia cuando sostiene que las niñas López, tienen derecho a una “familia normal y tradicional” que es la compuesta por un padre hombre y una madre mujer.
La Corte Interamericana de Derechos Humanos de la organización de los Estados Americanos OEA, no juzga las causas a partir de la ideología judeocristiana que dio forma e impregna la cultura y construye el Estado de Derecho en todos los países del continente, sino que lo hace a partir de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, y que esta Declaración no establece un concepto cerrado de familia, ni define o protege un modelo “tradicional” de la misma, como sí lo hace meridianamente la Biblia, que es el fundamento de la ideología y cultura judeocristiana, por lo tanto el grupo constituido por la señora. Atala, su pareja mujer, el hijo mayor de esta, y las tres hijas menores, eran un núcleo familiar. En relación a la orientación sexual de la señora Atala y de su pareja mujer, la Corte Interamericanaza de Derechos Humanos de la organización de los Estados Americanos OEA, afirma que el ejercicio de la homosexualidad es un derecho protegido por la Declaración Universal de los Derechos Humanos. En la ideología y cultura judeocristiana el ejercicio de la homosexualidad es una desviación.
Por haber juzgado la situación de las niñas, la orientación sexual de la señora y la convivencia con su pareja mujer a partir de la ideología judeocristiana y no de la Declaración Universal de los derechos Humanos, la Corte Interamericanaza de Derechos Humanos de la organización de los Estados Americanos OEA, condenó a Chile, a efectuar un Acto público de reconocimiento de responsabilidad internacional, se trata de la realización de un acto público de “desagravio” a las victimas ”en forma verbal y escrita” que debería constar con la presencia de las más altas autoridades del Estado, incluyendo “al presidente de la República y al Presidente de la Corte Suprema”. En este Acto público, el Estado de Chile deberá declarar en forma verbal y escrita, que con esta sentencia violó la Declaración Universal de los Derechos Humanos.
Se trata del Acto público de mayor relevancia en la historia de Chile, que será transmitido a todo el mundo, y que en el fondo obliga al Estado de Chile a despreciar su historia, a repudiar su tradición, a abjurar de la fe cristiana, a desechar la Biblia, y a sublimizar, exaltar y deificar la Declaración Universal de los Derechos Humanos. En este Acto público, el Estado de Chile deberá degradar a la familia heterosexual y enaltecer la familia homosexual. En este Acto público deberá construir retóricamente una estatua dorada para elevar a las alturas el homosexualismo.
Los evangélicos de Chile Cristiano, llamaremos a ese día, el “Día de la Deshonra Nacional”
Para ese mismo día y a la misma hora en que el Presidente de la República de Chile y el Presidente de la Corte Suprema de Justicia deban humillarse e inclinarse ante la imagen de la Declaración Universal de los Derechos Humanos cuyo emblema símbolo será la homosexualidad, nosotros nos reuniremos para fundar el “Día de la Familia Normal y Tradicional”
El ministro de Justicia Teodoro Ribera, informó que el Gobierno ejecutará prontamente las medidas de reparación que contempla la resolución de la Corte. La Corte Interamericanaza de Derechos Humanos de la organización de los Estados Americanos OEA exige efectuar el Acto público, antes del próximo 24 de febrero del año 2013.
Source
http://www.diarioconstitucional.cl/EditorFiles/File/ATala_.pdf
http://www.corteidh.or.cr/docs/casos/articulos/seriec_239_esp.pdf
http://blogs.elmercurio.com/editorial/2012/03/22/fallo-en-el-caso-atala.asp
http://es.wikipedia.org/wiki/Corte_Interamericana_de_Derechos_Humanos
http://blogs.elmercurio.com/columnasycartas/2012/03/21/caso-atala-2.asp