Aún tenemos Patria ciudadanos I
A derrotar una Ley C-4 en el país

 

Imagen1021             Pastores Jacob Reaume y Quince Steven del Canadá seguirán predicando la sexualidad bíblica

 

Con la conformación del gabinete designado por el Presidente electo, son varias las derrotas que hemos sufrido, sí, porque nosotros somos los únicos que defendemos los valores cristianos en el país. El presidente en ejercicio lo describió clarito el jueves 9 de diciembre del año pasado cuando celebró la promulgación de la ley del matrimonio homosexual, él dijo ese día: “Hoy es un día histórico y de grandes emociones, hoy vamos a promulgar la Ley de matrimonio igualitario. En nuestro primer Gobierno impulsamos el Acuerdo de Unión Civil, que permitió por primera vez en Chile, darle un reconocimiento legal a las relaciones de amor y afecto entre parejas del mismo sexo, también promulgamos la Ley Zamudio, para terminar con las discriminaciones arbitrarias, cuyo origen fue el caso de Karen Atala y su familia hace ya 10 años, y al comienzo de este Gobierno promulgamos la Ley de Identidad de Género, que otorgó a toda persona el derecho a ser reconocida conforme a su género, y, siguiendo el camino que inició la Presidenta Bachelet, a quien agradezco, hoy llegó el tiempo del matrimonio igualitario.”

Y, a partir de ahora, viene la demolición de los valores cristianos, lo que en el mundo se llama la “cultura de la cancelación” y que en este mismo momento sufren los pastores evangélicos canadienses, y que consiste en la prohibición de aplicar tratamientos para que las personas homos y lesbos vuelvan a la heterosexualidad en la que nacieron, lo que choca de frente con la predicación del evangelio. El pasado domingo 16 de enero el Senado canadiense aprobó la Ley C-4 que califica la moral bíblica como una mentira y prohíbe las enseñanzas bíblicas sobre la sexualidad. Los predicadores evangélicos que enseñen la biblia y los mandamientos del Señor Jesucristo sobre la santidad sexual, serán penados con cinco años de cárcel. Frente a esta ley, los pastores canadienses han reaccionado con indignación, pero demasiado tarde, y si bien es cierto, que el Parlamento de Canadá la tramitó vía exprés, ellos debían estar al tanto para oponerse. Que no le suceda lo mismo a los predicadores chilenos, atento a los Proyectos de Ley, hay que derrotar una Ley C-4 en el país, aún tenemos Patria ciudadanos.

Canadá es el primer país del mundo en fusilar la libertad religiosa cristiana, y el segundo lugar lo quiere ocupar Finlandia, condenando a la ex primera ministra Päivi Räsänen con seis años de cárcel por escribir en su perfil de facebook los textos de Romanos 1: 24 al 27 “Por lo cual también Dios los entregó a la inmundicia, en las concupiscencias de sus corazones, de modo que deshonraron entre sí sus propios cuerpos, ya que cambiaron la verdad de Dios por la mentira, honrando y dando culto a las criaturas antes que al Creador, el cual es bendito por los siglos. Amén. Por esto Dios los entregó a pasiones vergonzosas; pues aun sus mujeres cambiaron el uso natural por el que es contra naturaleza, y de igual modo también los hombres, dejando el uso natural de la mujer, se encendieron en su lascivia unos con otros, cometiendo hechos vergonzosos hombres con hombres, y recibiendo en sí mismos la retribución debida a su extravío.” 

Cuando el Presidente en ejercicio celebró la publicación de la ley de matrimonio homosexual dijo que: “Esta ley también protege la libertad religiosa, porque es una ley de matrimonio civil que respeta los matrimonios religiosos, que tienen la libertad de definir sus propias condiciones y naturaleza. Sabemos que en nuestro país hay posiciones distintas sobre esta materia, que reconocemos como legítimas y respetables. En el pasado, mi mirada fue distinta, pero, así como es importante en la vida actuar con convicciones profundas, también es importante y me siento orgulloso de haber podido desarrollar nuevas perspectivas. El Estado siempre debe cumplir su rol fundamental de promover una sociedad libre, diversa, tolerante e inclusiva, y evitar que existan discriminaciones arbitrarias o privilegios entre sus ciudadanos”. El primer ministro de Canadá, también mintió cuando el miércoles 17 de Julio del 2019 en una convención musulmana, dijo: “Siempre defenderemos la libertad de religión y los derechos humanos aquí en Canadá y en todo el mundo”