Obama gana la presidencia en histórica jornada para los demócratas

STEVEN R. HURST/AP

WASHINGTON

Barack Obama escribió su nombre con tinta indeleble en la historia estadounidense el martes al convertirse en el primer presidente negro del país con una aplastante victoria sobre John McCain, impulsada por un mensaje de renovación política y social.

El senador de Illinois, de 47 años, hijo de una mujer blanca de Kansas y de un padre negro de Kenia, explotó el profundo descontento que hay con el actual estado de cosas y prometió una nueva era de cambio y esperanza a lo largo de una impecable campaña electoral de 21 meses.

Si hay alguien que todavía duda que en Estados unidos todo es posible, que se pregunta si el sueño de los padres de la patria sigue vivo, que cuestiona el poder de nuestra democracia, esta noche tienen su respuesta'', declaró Obama en su primer discurso como presidente electo.
Hablando ante una multitud en un parque de Chicago, afirmó que el país enfrenta "los más grandes desafíos: dos guerras (en Irak y Afganistán), un planeta en peligro, la peor crisis financiera en un siglo''.

"Hay muchos que no estarán de acuerdo con todas las decisiones o las políticas que adopte como presidente, y sé que el gobierno no puede resolver todos los problemas'', agregó. "Pero siempre seré honesto con ustedes acerca de los retos por delante''.
El presidente Bush también se comunicó telefónicamente con Obama. "Qué noche tan extraordinaria para usted, su familia y sus partidarios'', le dijo el mandatario.

"Se dispone a iniciar uno de los capítulos más importantes de su vida. Lo felicito. Que lo disfrute'', señaló Bush, quien le prometió a Obama una transición sin complicaciones, según la portavoz del presidente Dana Perino.

Una encuesta a boca de urna, aplicada por The Associated Press detectó que seis de cada 10 votantes en Estados Unidos mencionaron la economía como el problema principal del país. Ninguno de otros cuatro temas enumerados en la lista -- energía, Irak, terrorismo o atención a la salud -- fue elegido por más de uno de los 10 entrevistados.

Los resultados se basan en una muestra parcial y preliminar de casi 10.000 electores a la salida de las urnas, así como en entrevistas telefónicas hechas la semana anterior a quienes emitieron su voto anticipado.

Para ganar, un candidato debía conseguir al menos 270 votos electorales que reparten los estados, según asignaciones proporcionales el número de habitantes.

Obama votó en la escuela de párvulos Beulah Shoesmith, en Chicago, poco después de las 7:30 de la mañana (1330 GMT), vitoreado por los asistentes cuando mostró su papeleta electoral. Le acompañaron su esposa Michelle y sus dos hijas.

En Phoenix, McCain depositó su voto en una iglesia antes de volar a Colorado y Nuevo México, para participar en actos proselitistas.
Source: http://www.elnuevoherald.com/167/story/315760.html

Comentarios del director

El periodista, autor de la noticia en comento, tiene toda la razón, la victoria de Obama sobre McCain fue aplastante; la altísima y excepcionalmente temprana cifra de votos electorales conseguidas de 364, 94 más de los necesarios, frente a los 163 de su contendor y la superior cantidad de 7.238.000 votos populares así lo demuestran.

En lo que el articulista no tiene la razón, es en la explicación que ofrece para justificar la victoria del demócrata, dice que Barack “…explotó el profundo descontento que hay con el actual estado de cosas…” Esta aseveración no es intrínsecamente inexacta, pero absolutamente inobjetiva. Lo que hay es mucho más que una explotación, es mucho más que un profundo descontento, y no tiene nada ver con las cosas. La real situación está lejos de parecerse a lo descrito. Empecemos a desglosar la cuestión. Lo que verdaderamente hay, tanto en Estados Unidos, como en el mundo, no es descontento, no es rechazo, no es antagonismo, es algo superior, lo que hay, es odio. El mundo odia a los Estados Unidos de América y sobre todo, odia a su presidente. Para millones, Bush es un asesino, es un criminal y lo exclaman abiertamente. Un ejemplo irrefutable de este odio, es el último mensaje dado por el presidente de Venezuela en las Naciones Unidas, allí, Chávez dijo que Bush era el Diablo. Poco tiempo después, el mismo Chávez expulsaba al embajador norteamericano tratándolo de “gringo de mierda”. Los políticos, la opinión pública y especialmente los periodistas no pueden desconocer ni alegar inocencia en esto. Hay que recordar que después de las Torres Gemelas fue tema nacional de debate en USA, porque el mundo nos odia tanto. Yo he podido observar directamente, el odio a Estados Unidos y particularmente a Bush, entre los chilenos en general y particularmente entre los comunistas, los socialistas, en políticos demócratas cristianos de mi país, incluso, lo he palpado en predicaciones hechas por pastores evangélicos desde el púlpito de las iglesias.

Y frente a es este odio, cabe preguntarse: ¿Qué le ha hecho Estados Unidos al mundo? ¿Que le ha hecho Bush al mundo, para que exista esta espesa nube de odio?

Personalmente creo, que este odio, es un programa político, nacido en los corazones, diseñado, planificado y promovido por liberales pertenecientes al partido Demócrata y que el mundo entero, ha asumido, sin ninguna reflexión, ni tampoco necesidad, porque a los únicos que ha realmente a beneficiado es a los Demócratas, y particularmente a su abanderado.

Con la última aseveración, paso a contradecir el asunto de la explotación de que habla el periodista del Nuevo Heraldo. El candidato Obama, efectivamente explotó, pero no el descontento, sino el odio a Bush. ¿Cuál es la ideología que proclamó Obama? ¿Cuál fue el programa de gobierno que presentó a los votantes? Nunca habló de eso, no los tenía, ni los necesitaba. Su discurso fue siempre el mismo y uno solo: Las políticas de Bush no pueden seguir, el pueblo norteamericano no puede soportar cuatro años más de lo mismo de Bush. Señores y señores, MaCain es Bush. Y los votantes, cada cual odia más a Bush, deliraban con estas palabras y entendían que votando por Obama podrían dispararle de frente al odiado de sus corazones y de las naciones. Obama hizo algo más que explotar, lo que hizo fue expropiar para el beneficio de su exaltación personal, el odio que los liberales de su partido esparcieron por el mundo entero. La gente no votó por Obama, votó en contra de Bush.

Después de este personal comentario, la pregunta que hago es la siguiente: Bush dejará de estar en le presidencia y en la Casa Blanca después del 20 de enero próximo.

¿Qué hará Obama para mantenerse en la gloria, a la cual se alzó en la alfombra voladora del odio, odio que ya no tendrá sentido de existir?